Hola Jorge, gracias por escribirnos. Las ligustrinas, especialmente cuando se las deja crecer demasiado, como es tu caso, comienzan a sufrir de autosombreamiento. Las ramillas a las que no llega la luz van perdiendo las hojas. Si te fijas, las ramillas de más abajo tienen hojas solo en el extremo. Asi es que es probable que exista un problema de falta de luz. Dicho esto, no es posible descartar también la existencia de algún problema relacionado con hongos, pero difícil saber sin ver la planta. Entonces, para cualquiera de las dos situaciones, en muchos casos lo que conviene es hacer una poda fuerte. La ligustrina responde muy bien a ella. Nuestra sugerencia es que la rebajes a tal vez la altura de la rodilla. Eso te permitirá rejuvenecer la madera, y tener nuevo follaje. Eso sí, debes tener la precaución de podar durante los inviernos siguientes no solamente mochando el follaje para emparejar, que es lo que uno suele ver en la mayoría de los jardines, si no también ir eliminando la madera del interior, a la que no llega sol, de manera de ir renovando paulatinamente la estructura de la planta en el futuro. Y si era un hongo, el crecimiento nuevo y vigoroso en la primavera será más resistente. Te deseamos mucho éxito con tu ligustrina, ¡saludos y cuídate Jorge! Equipo HUM.