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¿cómo hacer una bodega para espacios reducidos?

¿Cómo hacer una bodega para espacios reducidos?

Publicado el 14 Jun. 2017

Tiempo de ejecución +10 Horas
Dificultad Alto

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La mantención del jardín o las plantas que tenemos en la terraza implica, generalmente, acumular herramientas y materiales que no siempre tenemos dónde almacenar. Por eso en este proyecto queremos proponerte una bodega para esos materiales, que pueda ser implementada en la terraza o estacionamiento de un departamento, o también en un jardín.

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Paso a Paso

Esta bodega se caracteriza por utilizar muy poco espacio, ya que solo mide 60 cm de profundidad. Para posibilitar su traslado la hicimos en base a 3 piezas independientes: dos módulos para formar su cuerpo y una tarima para protegerse de la humedad.

Corta la madera

Con sierra circular corta las vigas de pino de 2×4” hay que cortarlas en 2 trozos de 2 m y otros 3 de 50 cm para los travesaños.
Las tablas de 1×4” que serán para el piso de la tarima hay que cortarlas en 20 trozos de 58 cm.
Las tablas 2×1” para hacer los bastidores de los módulo se cortan con la sierra circular en 12 de 54 cm para los travesaños de los laterales, 6 de 180 cm para los verticales más altos, 6 de 140cm para los verticales más bajos, 6 de 96 para los travesaños de la trasera.
Para dimensionar el terciado ranurado que será el forro de la bodega también puedes usar la sierra circular. Necesitamos 2 trozos de 60×140 y 4 de 180×100 para el fondo y la puerta.
El terciado estructural de 18 mm es para el techo de la bodega, y por eso corta 2 trozos de 60×120 cm.

Arma la tarima

Forma un rectángulo con los cortes de las vigas de pino de 2×4”, usando para los lados largos trozos de 2 m y otros tres de 50 cm para los travesaños, el tercero al centro. Haz las fijaciones con tornillos tirafondo de es 1/4 x 4”, usando dos tornillos cada vez.
La forma de instalar estos tornillos requiere realizar primero una perforación con una broca paleta de un tamaño que permita a la golilla del tornillo entrar cómodamente, y tan profunda como la cabeza del mismo tirafondo. Esto es para que no sobre salga en el resultado final. Luego realiza una perforación con una broca de 6 mm que funcionará como guía para el tornillo. Este procedimiento es fundamental, ya que sin esta guía la cabeza del tirafondo podría quebrarse al forzar con el taladro.

Como piso de la bodega, la tarima lleva un entramado de palos de 1×4” separados entre sí por 1 cm, que unimos a las vigas con tornillos de 1 5/8” de color negro, 2 por unión.

Forma el esqueleto de los módulos

El esqueleto de los 2 módulos de la bodega se arma con listones de pino cepillado de 2×1”, que unimos con prensas esquineras, haciendo sus fijaciones con cola fría y tornillos 1 5/8”.

Cada uno de los módulos se realiza con 3 bastidores; 2 laterales y 1 para el fondo. El fondo tiene una altura de 1,80 m en uno de sus lados y 1,40 en el otro para generar la pendiente. Y los laterales se diferencian en que uno mide 1,8 mt y el otro 1,4 para calzar con la pieza del fondo.
La unión de los bastidores es con tornillos 1 5/8”.

Forra los módulos

El único trozo que conviene cortar una vez que están hechos los módulos es el que forra el fondo, ya que debe tener la inclinación superior. Para eso lo más conveniente es cuadrar la plancha de terciado en el bastidor y marcar la línea diagonal para luego cortar con la sierra circular.

Todos los trozos de terciado ranurado se fija al esqueleto de los módulos con tornillos 1 1/4”, dejando los 2 cm pasados en el borde inferior para que oculte la tarima.

Haz las puertas

Las 2 puertas de la bodega se hacen al revés que el resto de la estructura. Se dimensiona el terciado ranurado se refuerza con trozos de pino cepillado de 1×2”, fijándolo por su lado más ancho con tornillos de 1 1/4”.

Protege la madera

Considera que la bodega estará a la intemperie y a la vista constantemente, por eso usa como protector un stein de color, elegimos el negro con terminación mate, que mantendrá la veta de la madera a la vista. Este producto se aplica con rodillo y brocha, para cubrir perfectamente las ranuras del terciado.
Proteger la tarima, los 2 módulos y los trozos de terciado estructural 18 mm para el techo.

Fija el techo

La madera elegida para el techo es terciado estructural de 18 mm de espesor, es lo suficientemente resistente para resistir el peso de la teja asfáltica. Fija cada trozo formando la techumbre de 2 aguas con tornillos 3”, cuidando que sus cantos se encuentren en su filo inferior.

Pone una capa de fieltro, que funciona como aislante. Se dimensiona con tijera según la superficie donde se instalará y en este caso se engrapa al terciado estructural.

Corta la teja asfáltica con tijera hojalatera y fíjala al techo con clavos terrano 3/4”. La forma correcta es ir instalando las piezas recortadas de abajo hacia arriba, para que las superiores las vayan cubriendo.

Une los módulos

Ubica los 2 módulos sobre la tarima y fíjalos a ella y entre sí con tornillos 3”, salvo el encuentro de los bastidores de 1,80 m, que se hace con tornillos de 1 5/8”.

Finalmente, con los retazos que quedaron al dimensionar las tejas, haz una última hilera en el encuentro de los dos techos de los módulos a modo de cumbrera del techo.

Teja asfáltica

Las bondades más reconocibles de la teja asfáltica son su resistencia, su escaso peso y la facilidad con que se instalan, además no requieren mantención.

Fija la quincallería

Debido a que la parte más amplia de las puertas queda suspendida cuando se abren, y soportada por su lado más bajo, refuerza esa zona con tres bisagras con rodamientos para cada puerta.

El seguro de la puerta puede hacerse con un picaporte, o sumarle elementos: Un portacandado y retenes para que las puertas, cuando se cierren, queden a perfectos 90º de su eje.

Quincallería

Para cuidar la estética del mueble elegimos tornillos fosfatados que son negro, lo mismo puedes hacer con la quincallería: utilizar bisagras y picaporte color negro que no resaltarán con el tono de la bodega.