
Publicado el 21 Nov. 2014
Publicado el 4 Sep. 2015
Uno de los mayores problemas que enfrenta una huerta al aire libre es el ataque de plagas. Por eso, en este proyecto se enseñará a realizar una huerta rodeada de plantas protectoras, que alejen cuncunas, pulgones, y para eso se usarán bloques de concreto que servirán de macetas.
Para tener una huerta sana y con especies variadas debe ser ubicada en una zona que reciba luz del sol la mayor parte del día. De lo contrario solo podremos cultivar hortalizas con baja exigencia de luz.
Bloques de concreto
Estos bloques de cemento listo están diseñados para usarlos en construcción o en el armado de parrillas a carbón, pero al ser muy estéticos y resistentes a la humedad son ideales para ponerlos en el jardín.
Tipos de sustratos
Para los bloques, por ser un espacio cerrado, se eligió poner como sustrato tierra para macetero, ya que viene con residuos de corteza, arcilla y fertilizantes para que las plantas en ese espacio reducido puedan tener todo lo que necesita para su desarrollo. Y para la huerta, se eligió compost y arena de lampa; el compost entrega nutrientes en forma lenta y prolongada, aumentando la porosidad del suelo, y la arena de lampa aporta el drenaje necesario.
Recomendaciones
Para tener abastecimiento y surtido por un mayor tiempo, se recomienda distribuir la plantación durante un período de 3 a 4 semanas, en intervalos de 3 o 4 días en cada variedad. Y la distancia de plantación está determinada por el tamaño de las plantas.
Nutrientes disponibles
Las verduras de hoja, cuyas raíces son más superficiales, extraen fundamentalmente nitrógeno; las de raíz más profundas, toman sobre todo, potasio. Por otro lado hay especies como las legumbres (arvejas, habas, etc.) que son conocidas como reponedoras, porque aportan nitrógeno al suelo, por lo que conviene combinarlas con papa, tomate, berenjena, ajíes.
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