Cómo instalar cerámica sobre cerámica

Lo primero que debes hacer es verificar que las palmetas del piso no estén sueltas.

• Si están rotas no importa, porque después podrás rellenarlas con el mismo pegamento.
• Lo importante es que esté todo bien pegado. Revísalo minuciosamente golpeando suavemente en el centro y los bordes del piso con un mazo de goma.
• Si encuentras que alguna palmeta está suelta, pégala con cualquier adhesivo para cerámica o con el que se utiliza en este proyecto.

 

 

Antes de empezar a pegar las cerámicas, es muy importante que realices una buena limpieza del piso, ya que el adhesivo que vas a ocupar tiene que ser aplicado sobre una superficie completamente libre de polvo.

• Para trabajar más cómodamente y limpiar mejor, desatornilla las bisagras de la puerta con un desatornillador manual y desmóntala.

 

• Barre el polvo con un escobillón 
• Pasa una mopa o trapero húmedo (sin productos ni limpiadores) para dejar el piso libre de cualquier residuo. Esto es esencial para el buen agarre del adhesivo.

 

 

Planificar el diseño puede ser una tarea muy divertida, ya que es el momento en que decidirás cómo quieres que se vea el piso nuevo.

• Se utilizaron en este proyecto unas cerámicas hexagonales en colores blanco, gris y negro. 
• Al momento de planificar el nuevo diseño, evalúa el tipo de patrón que usarás y qué color quieres que predomine, para lograr un piso más claro o más oscuro.
• Aquí te dejamos algunas ideas de diseños para tu nuevo piso.

 

• En esta ocasión se siguió un patrón construido por hileras completas blancas y grises, y otras mezclando grises y negros de forma alternada. 
• Así, conseguirás un piso más claro, con predominancia del color blanco y gris.

 

 

Para preparar el adhesivo que usarás para pegar cerámica sobre cerámica necesitarás una batea grande, una plana y agua.

• La dosis para prepararlo es de 2,1 a 2,5 litros de agua por cada saco de pegamento.
• Pon el agua en la batea y deja caer el adhesivo en polvo sobre ella.
• Deja reposar por 5 minutos.

 

• Luego, revuelve con la plana hasta lograr una mezcla homogénea. 
• Deja reposar 5 minutos más y el pegamento estará listo para ocupar.

 

 

Vas a empezar a instalar la cerámica desde el lugar más visible del espacio que tiene mayor protagonismo. En este caso, es el sector que está al lado de la tina. Así, el diseño elegido se verá desde la puerta.

• Utiliza una llana de 10 mm para esparcir el adhesivo. No olvides usar guantes de albañilería y rodilleras para facilitar el trabajo.
• Aplica una cantidad de pegamento en el piso y peina con la llana, haciendo surcos.

 

• Aplica pegamento también en el reverso de la cerámica nueva. Esto es clave para que el adhesivo pegue mejor.

 

• A medida que vas avanzando con la instalación y para respetar el patrón del diseño, tendrás que ir cortando algunas cerámicas a la mitad.
• Para eso usa un cortador para cerámicas, ajustando la línea de corte en la herramienta y deslizando el disco de corte.
• Presiona hacia abajo y logra un corte perfecto.

 

• Usa separadores de 2 mm entre cada palmeta.

 

• Golpea con el mazo de goma para asentar las palmetas.

 

• Usa un nivel de burbuja para ir comprobando que todas las palmetas queden al mismo nivel.
• Si hubiera una un poco más arriba, levántala para sacar un poco de adhesivo y pégala de nuevo, golpeando con el mazo de goma para que quede nivelada.

 

• Si necesitas hacer cortes circulares o encajar alguna pieza, como en el sector del desagüe, marca la palmeta con la forma que se requiere.

 

• Luego, córtala con el esmeril angular y un disco de corte diamantado. 
• Recuerda usar todos tus elementos de seguridad.

 

• Pega la palmeta en el lugar deseado.

 

• Sigue pegando cada palmeta de la misma forma: aplicando pegamento, poniendo los separadores y golpeando con el mazo de goma.
• Es muy importante que vayas limpiando constantemente con un paño húmedo todos los restos de adhesivo que vayan quedando. Así, no vuelves a pisar lo recién instalado.

 

• Una vez que hayas completado el piso, deja secar por 8 horas.

 

 

Cuando ya esté seco el pegamento vas a proceder a aplicar el fragüe para rellenar todas las junturas entre las cerámicas.

• En esta ocasión se usó un fragüe de color negro, pero tú puedes elegir el de tu preferencia. 
• El fragüe se prepara con agua en una proporción de 350 a 400 cc por cada kilo de fragüe.
• Prepara el fragüe en un balde y mezcla bien hasta obtener una consistencia homogénea.

 

• Aplica el fragüe en las cerámicas con una espátula y un fraguador de goma por todo el espacio, procurando que los espacios entre los cerámicos se rellenen.
• No olvides usar guantes de albañilería, rodilleras y un buzo para no ensuciarte con el fragüe.

 

• Deja secar por 30 minutos.

 

• Limpia el polvo que queda del fragüe con una esponja húmeda.

 

 

Ahora que el piso subió de nivel vas a tener que rebajar la puerta para que pueda abrirse y cerrarse sin problemas.

• En esta ocasión, se rebajó a una altura de 1 cm. 
• Marca la altura con una regla o listón, trazando una línea derecha en la parte inferior de la puerta.

 

• Ajusta la sierra circular en la línea y corta. Recuerda protegerte con guantes, lentes de seguridad y respirador.

 

• Instala nuevamente la puerta en su lugar, atornillando las bisagras.

 

¿Qué te parece cómo ha quedado este baño? Pegar cerámica sobre cerámica puede ser una solución excelente para renovar tu espacio ahorrando tiempo y trabajo, sin tener que sacar el piso anterior. ¡Hasta la próxima!